¿Las vacaciones se llevaron el relax y dejaron inestabilidad financiera? Si bien la recomendación pre-vacaciones es presupuestar los gastos y seguir a rajatabla lo pactado, pueden surgir imprevistos que desestabilicen tu economía.
Si volviste en rojo por esos gastos extraordinarios del receso invernal, tenemos algunas sugerencias para que te repongas financieramente de forma organizada:
Ajustá tus finanzas después de viajar
Después de unas semanas llenas de gustos puede ser difícil volver a la rutina. Probablemente, bajo el lema “estoy de vacaciones” hiciste algunos gastos innecesarios de los que ahora te estás arrepintiendo. Si llevás el registro de tus gastos habitualmente, volvé a esa práctica y poné el ojo en aquellos gastos que podés reducir: planificá las comidas para evitar comprar recurrentemente delivery, cancelá las compras en kioscos por antojos repentinos y reflexioná antes de realizar cualquier compra.
Además, otra forma de ajustar tus finanzas es poniendo atención a los descuentos que podés obtener pagando con tu Reba American Express. La clave es dedicarle tiempo y reflexión a tus finanzas.
Elaborá un presupuesto post-vacaciones
Las finanzas personales después de las vacaciones son saludables con un presupuesto en mano. Para realizarlo tenés que tener en cuenta tus ingresos y los gastos fijos y variables que vas a tener durante el mes en el que vas a reacomodar tu economía. Podés utilizar aplicaciones de presupuesto para hacer la tarea más fácil y tenerlo a mano en tu celular.
No te olvides de incluir las deudas que generaste durante tus vacaciones si realizaste pagos con tarjeta de crédito que excedan tu presupuesto habitual.
Una vez que hayas organizado y programado tus gastos, lo que resta es seguir esa planificación.
Prorizá pagar las deudas con tarjeta de crédito
¿Te pasaste un poco “de la raya” pagando con la tarjeta de crédito? Si esos gastos no fueron planificados pueden dañar tu economía y no queremos que eso suceda.
Ajustar tus gastos para poder pagar el resumen de la tarjeta en su totalidad es clave para no entrar en mora y generar intereses punitorios que, además de quitarte puntos en el scoring crediticio, hacen que la deuda sea cada vez más difícil de pagar. Si tu puntaje crediticio es bajo, podés tener dificultades para solicitar préstamos personales y nuevas tarjetas de crédito en bancos e instituciones financieras. Por eso, procurá pagar siempre al menos el mínimo.
En tu presupuesto personal, poné como prioridad salir del endeudamiento por sobre el ahorro o las inversiones. Ya habrá tiempo para eso en el futuro.
Trabajá en crear un fondo de emergencia
Llegó el momento de reflexión: si todavía no lo tenés, creá un fondo de emergencia para poder resolver imprevistos como el exceso de gastos durante las vacaciones.
Tener un fondo de emergencias hace que sea posible volver a tu realidad financiera regular de una forma más fácil, sin necesidad de volver a revisar tus gastos y ajustar un poco más tu economía.
Una vez que hayas cancelado las deudas y reacomodado tu economía, la prioridad debe estar en evitar ese tipo de situaciones e incluir en tu presupuesto el armado de un fondo para eventualidades. Además, te ayudará en otras situaciones de estrés financiero como arreglos de la casa de emergencia o gastos médicos sorpresivos.
Una vez que te hagas reacomodado, podés empezar a planificar tus próximas vacaciones. No te olvides que tener objetivos financieros es una de las claves para ahorrar con motivación.
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