Si estás siempre preocupándote por el dinero y tenés dificultades para alcanzar tus metas, debés prestar atención a tu salud financiera ya que afecta directamente en tu calidad de vida.
Tener dominio sobre tu situación financiera te brindará capacidad para lograr tus propósitos a mediano y largo plazo, y tener más libertad y recursos para tomar decisiones sobre tus objetivos personales y profesionales.
En Reba te queremos ayudar a que tomes el control de tus finanzas y alcances tus metas financieras. Por eso, en este paso a paso te contamos cómo mantener tu salud financiera para que logres lo que te propongas:
- Empezá a ordenar tus finanzas.
- Realizá un presupuesto.
- Establecé metas.
- Evitá gastos innecesarios.
- Buscá ingresos adicionales.
- Invertí a largo plazo.
1- Empezá a ordenar tus finanzas
La planificación financiera es fundamental para alcanzar objetivos. Realizá una lista de tus ingresos, gastos, deudas y determiná tu capacidad de ahorro. Una vez que tengas en claro cuál es tu situación actual, podrás comenzar a idear tu plan.
La app de Reba te ayuda a llevar un control de tus gastos. En “Mi dinero” podés ver todos los movimientos que realizaste en el mes, diferenciando compras, transferencias, pagos de servicio, carga de transporte, entre otros conceptos.
2- Realizá un presupuesto
Establecer un presupuesto te permitirá controlar mejor tus gastos.
Al inicio del mes debés saber cuáles son tus gastos fijos, aquellos que se mantienen constantes en el tiempo como los servicios, el alquiler, las cuotas de un préstamo o de una compra importante con la tarjeta de crédito, el gimnasio o los gastos del auto, y determinar un estimativo o un límite de los gastos variables, compras de ropa, salidas, etc.
Así sabrás la cantidad de dinero con el que contás para invertir. Aprovechá, te conviene hacerlo a comienzo de mes porque ahorrarás más reduciendo el riesgo de que surjan gastos inesperados a fin de mes que lo impidan.
Si tenés deudas, tu prioridad debe ser saldarla. Organizá un plan de pago para que no genere intereses y empeore tu situación financiera.
Recordá esta regla de oro: no gastes más de lo que ganas.
3- Establecé metas
Tenés que saber hacia dónde te dirigís: teniendo un objetivo claro es más sencillo y, sobre todo, motivador organizarte.
Elegí un objetivo a largo plazo como cambiar el auto, irte de vacaciones, ahorrar para mudarte o comprar los electrodomésticos. Luego, definí objetivos a mediano plazo que te acerquen a ese gran sueño: metas de ahorro. Podés establecer una cantidad de dinero para ahorrar por mes durante un año, teniendo en cuenta tus ingresos y gastos, para luego cumplir ese gran objetivo.
Por ejemplo, si decidís cambiar el auto y te ponés como meta ahorrar junto a tu pareja US$ 5.000,- podrían, juntar 500 por mes para alcanzar el objetivo a los 10 meses.
4- Evitá gastos innecesarios
Evitar las compras impulsivas no es tarea fácil. Para poder escapar de esas situaciones y hacer que tu dinero no se malgaste en compras innecesarias hacete una pregunta sencilla, ¿realmente necesito esto que estoy a punto de comprar?
Si implementás este consejo recurrentemente te vas a dar cuenta que esquivaste más de un gasto importante por, tan solo, tomarte un momento. Tu salud financiera te lo va a agradecer.
5- Buscá ingresos adicionales
Si tu profesión lo permite, en tu tiempo libre trabajá como freelance vendiendo servicios en la web: diseño gráfico, programación web, gestión de redes sociales, redacción, etc.
También podés aprovechar para deshacerte de las cosas que no utilizas vendiéndolas en línea. Hay muchísimas páginas y aplicaciones en donde podés ofrecer artículos y ropa usada para obtener un ingreso extra.
6- Invertí a largo plazo
Las inversiones permiten planificar tu futuro financiero. Invertí comprando dólar solidario o dólar MEP para que el dinero que pudiste ahorrar no pierda valor.
Además, otra alternativa que te permitirá obtener rendimientos de lo que lograste ahorrar es la inversión de un plazo fijo. Así, podrás asegurarte de que tus ahorros crezcan con el tiempo y obtener una rentabilidad por encima de la inflación.
Ya sabés, alcanzar tus metas requiere de planificación y compromiso financiero. Además, contar con una perspectiva a largo plazo y ser disciplinado en el seguimiento de tu plan de ahorro te ayudará a vivir la vida que querés.
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