Tiempo de lectura: 2 minutos Si siempre te llamó la atención el vínculo que tenemos con el dólar, lee esta nota que te cuenta el romance argentino, una larga historia que nos trajo hasta acá. El amor surge por algo, ¿no te parece? ¿Qué le vimos al dólar para quererlo tanto? Si sos de los que compra en modo automático, seguramente en esta nota encuentres las razones más comunes que nos llevan a atesorarlos. Resguardar valor Históricamente el valor del dólar se mantiene o se incrementa, es por ello que el ahorrista siente que es una manera de mantener su plata. Los números del Índice de Salario del INDEC refuerzan esta idea, ya que el poder adquisitivo decrece sistemáticamente desde hace varios años. Por otro lado, y en suma con esto, la falta de confianza en la moneda local hace que el ahorrista busque otras alternativas para guardar su plata. Ahorrar Muchas personas eligen tener sus ahorros en otra moneda porque de ese modo no los usan. El que guarda, tiene. Es como ponerle un candado personal a nuestra plata. No se cambia, no se usa. Otras personas eligen esta moneda porque quieren comprar algo que les llevará bastante tiempo de ahorro. Y una vez que tienen toda la plata en dólares, cambian a pesos y compran la compu, la moto o eso que los hace felices. Tradición En casa siempre se ahorró en dólares. Si viste a tus abuelos y a tus viejos ahorrar en esa moneda es muy común que continúes con esa práctica. Las personas tendemos a repetir aquello que vimos mientras crecimos. Son costumbres que nos van marcando y que repetimos como la pasta o el asado de los domingos o la pizza de los viernes. Una historia de amor con el dólar Algunos compran dólares por el contexto, por necesidad